Néstor Valdivia: Naranja amarillo. Poesía

Esas tres palabras con que me subyugas a tu lado,
a tus pesadillas de medio día, a tus estertores de mediopelo y más abajo.
A tus caderas exprimidas por tus tiempos de media noche
con lucecitas led, de ojos irritados por tus alergias y emociones matutinas.

Sin esperas,
sin colación en las penumbras de las nieblas lechosas
que se van escurriendo por tus costillas,
y por el surco formado
guiados por mis dedos,
que divide en dos tu espalda,
río seco a punto de ser humedecido por la promesa de un sudor esperado.

Con tus equivocaciones de siempre,
repetitiva como gotas que mojan tus zapatitos de charol rayado
en medio de los emplastos que vas dejando atrás.

Tomaré en cuenta que me demoraré cinco minutos en darte el alcance,
que tus pies ágiles o ligeros no me dan chance a tomarte
con tres cubos de hielo y cinco gotas de limón.

Me tienes complaciente al llamado de ser negado tres veces antes que anochezca
para dar rienda libre a los que despiertas antes del cantar del gallo
y después de los aullidos de loba sin luna llena, alunada
y me dormita en el sudor que traspasa mis almohadas
humectadas de tanto pensar sin soñar, sin remordimientos ni escrúpulos
de esos deseos de amor de manos en lejanía.

Me avinagras de cuando en cuando mientras las noches
que se te revelan en la serpiente que sube el árbol de tus piernas
y devora una a una las penurias que nunca te desvelan
pero carcomen tus virtudes.

Eres el pleonasmo de lo ideal,
de lo inesperado,
no eres imposible, preciosa, eres inevitable,
envuelta, deglutida y ensalivada por razones sin cuatro sentidos
y te queda el tacto sin tino, el contacto sin son ni ton,
de tus pechos apuntalados en mi espalda y tus dedos en mis vellos sin pecho
y el ronquido del eco que rebota en tu cerebro.

Y la noche se va yendo en azul prístino y llegando en naranja amarillo.

Autor: estoespurocuento

No me gasto en buscarle el sentido a la vida porque creo que no lo hay, somos simples animales racionales y más que una responsabilidad es una carga moral creado por nuestros miedos y temores al mas allá, que para mi tampoco existe. De polvo somos, por un polvo hemos nacido y en polvo terminaremos. Digo que soy agnostico por pura pose para evitarme conflictos teóricos con los que me restrigan la existencia de dios en mis narices. Ateo me cabe mejor, reniego de dios, lo confieso. No cabe las medias tintas, uno es o no es.

3 opiniones en “Néstor Valdivia: Naranja amarillo. Poesía”

  1. ufff que palabras! me dejas sin aliento, que bueno toparme con tu blog, soy de Chile…revisare mas de lo que has escrito, sin duda alguna me ha encantado!
    un abrazo

    1. Verónica, gracias por tus palabras, son un aliento a seguir escribiendo poesía, un género muy esquivo y duro para mi. en las categorías del blog encontrarás escritos con el seudónimo Melquiades, son de mi autoría. nuevamente gracias y sígueme leyendo. (con gusto seguiré le tuyo pero creo que olvidaste dejarme el link) un fuerte abrazo para ti también